Hoy, Néstor Lorenzo puede decir con tranquilidad que sus dos partidos iniciales que marcan el nuevo proceso en la Selección Colombia fueron un éxito. El primero, un juego de ‘entrenamiento’ contra Guatemala que poca reacción tuvo y el segundo, ante un rival mundialista que puso en aprietos a los colombianos, en especial en la primera parte.
Durante el primer tiempo contra México, se encontró con un rival difícil que acudió a la presión, le cerró los espacios y no permitió que Colombia se acercara con mucho peligro. La historia cambió en el segundo tiempo gracias a la confianza que los once jugadores tenían en ellos mismos y en sus compañeros con el objetivo de revertir el 2-0 que dejaron en el entretiempo.
Néstor Lorenzo entró a la rueda de prensa con el semblante de haber podido corregir aspectos que ayudaron en la segunda etapa. Sobre México, Lorenzo comentó, “De pronto en el primer tiempo México jugó con mucha suficiencia. Con confianza. Fue difícil para remontar y encontrar el partido. En el segundo tiempo cuando le marcamos rápido y presionamos alto ellos sintieron que se les fue la confianza. Ahí Colombia aprovechó para concretar”.
Evidentemente, hubo un cambio de cara en el complemento, Néstor Lorenzo dio las claves, “les dije que no alcanzaba con lo que estábamos haciendo, que nos comprometimos a hacer un partido intenso y que estábamos llegando tarde en la jugada. Que estábamos siendo tibios. A los 5 minutos estábamos perdiendo ya, el otro gol también fue medio accidentado. México con su presión y mérito nos hizo daño y nos hizo ver muy mal. Hablamos de eso. El compromiso era jugar a mil y estábamos jugando a 200. Lo atribuyo a la falta de confianza y con un equipo como México lo pagas caro”.
Contra Guatemala lo ganó con comodidad, acá sufrió. Sobre los dos encuentros concluyó, “el partido con Guatemala se hizo desde el primer minuto. En este sí salimos mal desde el fondo. No fue solo que no hubo intensidad, también tuvimos inseguridad en la salida y eso a México lo agrandó”.
Juan Guillermo Cuadrado jugó los 90 minutos del partido al igual que David Ospina. El de la Juventus tuvo varias facetas como extremo, interior o carrilero por derecha. Más en el segundo tiempo, Cuadrado fue importante para enlazar juego con los de ataque, “lo de Juan necesitábamos circulación rápida y pensamos que nos podía ayudar en ese sector y lo hizo fantástico”.
Apenas han sido dos partidos con Néstor Lorenzo. Sobre el rendimiento aseveró, “los cambios tienen que ser pequeños pero permanentes. Creo que tenemos que ir consolidando situaciones y sociedades que uno prueba y salen bien o salen mal. Es un largo camino y hasta el último momento vamos a seguir creciendo y no quiero hablar del porcentaje porque vamos a hablar de crecimiento. Se van dando pasos. Hoy el planteo del primer tiempo no fue bueno, pero en el segundo tiempo lo hicimos mejor, más intenso, ganamos confianza y México la perdió. No hay que hablar de porcentaje sino de crecimiento”.
Sumado a lo anterior, analizó el progreso de la selección, “el crecimiento es difícil de analizar y de seguir el progreso. Hay uno individual y otro del equipo. Mecanismos, automatismos y sociedades. En ese sentido analizaremos paso a paso y partido a partido siguiendo la evolución en sus clubes y cuando tengamos la oportunidad de juntarnos”.