Deportivo Independiente Medellín mostró una mejor expresión de su juego y logró vencer a un Millonarios que sigue en una profunda crisis. Los dirigidos por Aldo Bobadilla fueron de menor a mayor y al final lograron cortar una racha negativa de cinco partidos, si se cuentan los de Copa Libertadores. A continuación, las cinco claves del triunfo poderoso sobre los capitalinos.
Pausa: Frente a un equipo que por momentos fue avasallante, Medellín logró bajar las pulsaciones y no competir de igual a igual. Optaron por la tenencia de la pelota, buscar las diagonales y explotar las bandas. Con la pelota al piso y aumentando la velocidad del juego gradualmente. No se puede esconder que el local comenzó errático y lento en sus movimientos y con el pasar de los minutos logró tener una mayor cohesión.
Equilibrio: Con respecto a los otros partidos, la ausencia de Larry Angulo permitió que Adrián Arregui fuera un volante de recuperación que orbitaba en toda la zona media. Andrés Ricaurte se desempeñaba más mixto, mientras que Javier Reina ayudaba en el medio y explotaba en el frente de ataque. Con la llegada de Francisco Flores en el segundo tiempo, el sistema de juego pasó del 4-1-2-3 al 4-2-2-2, donde el equipo estuvo más compacto entre líneas y la movilidad estuvo mejor en defensa y en ataque.
Generación: Cuando se junta Andrés Ricaurte con Javier Reina, el resultado es buen fútbol y construcción de juego para Medellín. Pese a no estar tan finos, fueron jugadores destacados tanto en la tenencia, como en las claves para incomodar la zaga de Millonarios. Aunque no hubo aporte en ataque, Reina anotó su quinto gol con el equipo rojo y se convirtió en el goleador del equipo. Siendo un elemento que no solo crea, sino que finaliza.
Tenencia: Con un 52 por ciento de posesión, 402 pases de los cuales 313 fueron completados, 12 remates, 11 saques de falta, entre otros números, Medellín hizo un buen partido y logró redondearlo con mantener el arco en cero y ganar. Cuando tuvo la pelota fue agresivo, aunque por momentos le costó ser profundo.
Solvencia: De los 12 remates realizados, tres fueron al arco y uno entró. Aunque es una asignatura pendiente, Medellín volvió a marcar en elaboración y no producto de un rival como ocurrió en el clásico contra Nacional. Poco a poco se está convirtiendo en un equipo más contundente, pero debe trabajar más, especialmente en sus delanteros, quienes siguen en deuda.
Juan Camilo Álvarez Serrano
Corresponsal FUTBOLRED
Medellín
En twitter: @juanchoserran8