Tiger Woods sumó en las últimas horas una nueva polémica en su carrera luego de que su exnovia Erica Herman lo haya demandado por 30 millones de dólares, mencionando que fue desalojada de su mansión en Jupiter Island, Florida, donde vivió con el golfista por cinco años.
Según la versión de Herman, tras su ruptura con Tiger, el estadounidense accedió a que ella hiciera uso de la residencia durante un periodo equivalente al tiempo en el que estuvieron como pareja.
En el acuerdo verbal, se incluía un fideicomiso de Tiger se hiciera a cargo de todos los gastos de la casa por lo que los 30 millones solicitados corresponden al valor del alquiler durante los años que podía vivir allí.
No obstante, Erica dice que fue manipulada para abandonar la vivienda y ya no pudo entrar según mencionaron sus abogados.
"Mediante un engaño, los agentes del demandado (Tiger)convencieron a la demandante (Herman) de que preparara una maleta y se marchara para disfrutar de unas vacaciones cortas. Cuando ella llegó al aeropuerto, le dijeron que no volviera a la residencia".
Además, mencionó que no la dejaron acceder y entregaron sus pertenencias, salvo 40.000 dólares: "Se apropiaron indebidamente de más de 40.000 dólares en efectivo que pertenecían a Herman, utilizando argumentos difamatorios e injuriosos sobre cómo ella obtuvo el dinero".
Cabe señalar que Herman y Tiger se conocieron en un restaurante que el golfista abrió en Jupiter. De hecho, en 2019, ambos fueron demandados por la muerte de un camarero del establecimiento, pero esta no prosperó.
Por el momento ni Woods ni sus abogados se han pronunciado sobre la demanda de Herman. Sin embargo, el golfista ante este hecho confirmó que no estará en The Players Championship.