El 25 de diciembre es un día para pasar en casa la trasnochada, con la familia, de hacer pereza y desayunar en la cama... es día de descansar y no pensar... para todos menos para James Rodríguez.
El futbolista de Al Rayyan estuvo el 24 de diciembre en la cancha, en su primer partido después de 37 días de una pausa obligada en la Liga de Catar. Su último juego había sido contra Paraguay, de regreso a la Selección Colombia, por las Eliminatorias al Mundial de 2022.
Lució físicamente bien, hay que decir, peo él sabe mejor que nadie que eso es fruto del trabajo diario.
Por eso, el 25 de diciembre, madrugó como todos los días a hacer sus exigentes rutinas de gimnasio para mantenerse a tope.
¿A quién irá dirigido el mensaje de su disciplina en tiempos en los que todos los demás, incluso sus colegas de Selección Colombia, se dedican a descansar? ¿Estará tomando nota el técnico Reinaldo Rueda?
Para James no hay descanso, como dice él mismo. Alguna vez, en Santa Marta, causó un tremendo revuelo al aprovechar que nadie madrugaba -excepto él- y salió a trotar a la vía pública. Su mensaje es de esfuerzo, sacrificio y disciplina. Pero cada quien lo entiende como quiere.