Sigue en marcha el proceso en Argentina en contra del futbolista Sebastián Villa, acusado de agresiones físicas y psicológicas a Daniela Cortés, su expareja; sumadas a amenazas de la integridad de la mujer y su hija María José, quien vive en Medellín. El atacante de Boca Juniors ha negado los hechos, pero la posible víctima sea mantenido en las denuncias, apoyada por el abogado Fernando Burlando.
Así como se destapó el caso de violencia de género, Daniela volvió a aparecer en las redes sociales. Este viernes publicó en su cuenta de Instagram un mensaje de desahogo, y reveló el dictamen del médico forense que confirma las heridas de la última presunta agresión de Villa a la mujer, que fue el pasado 27 de abril.
Daniela confirmó que las imágenes que publicó, con heridas en su rostro y brazos, no son de una sola agresión. “Quiero responder a las personas que, sin conocimiento de la situación, han opinado sobre mi denuncia. Las fotos publicadas por mí el 27 de abril no son evidencia de un único episodio de maltrato por parte de Mi Ex pareja; son una recopilación de varias heridas que él me causó durante el tiempo que convivimos. Como dije al momento de la publicación, denuncio haber sido maltratada física y psicológicamente a lo largo de dos años. Quiero remarcar que las huellas de violencia que se ven en las fotos son prueba de la manera en la que él se comportaba constantemente”, comentó Cortés.
“En la imagen que acompaña este post, verán el dictamen del médico forense que me atendió dos días después de la última agresión. Como consta en el documento, varias de las heridas (edemas y equimosis en cabeza, brazo y muslo) que quedaron registradas en las fotos, corresponden a la agresión del pasado 27 de abril. Con este material probatorio (el concepto médico sumado a la evidencia que da cuenta de antiguos maltratos), seguiremos el proceso judicial”, continuó.
Finalmente, Daniela habló del entorno de Villa, que conocían su relación y sabían de las intimidaciones y agresiones del futbolista hacia ella. “En este momento no valen las opiniones solidarias de amigos, familiares y conocidos que quieren esconder la verdad. Todos los que estuvieron a nuestro alrededor ya saben lo que sucedía, incluso a la vista de algunos que ahora salen a desmentir los hechos”.
