Independiente Santa Fe no ha ganado después de siete fechas en la Liga II-2019. Colero ambos semestre, y por ende de la reclasificación, este jueves volvió a decepcionar a su afición, pues perdió 1-2 en El Campín y sigue sin despegar. Aunque en las toldas albirrojas prefieren no tocar el tema, el fantasma del descenso en 2020 se hace más visible con el paso de cada juego, de cada derrota.
Aunque anotó su primer gol del semestre en Liga, gracias a Fáiner Torijano, Santa Fe sigue sin dar pie con bola. Ya son 11 partidos consecutivos sin ganar en el campeonato, desde que derrotó al Huila en Neiva, el pasado 17 de abril. Pero como local, el expreso bogotano llegó a 14 partidos sin ganar en El Campín. Su último triunfo fue el 3 de noviembre de 2018, más de nueve meses, cuando venció 3-0 a Tolima.
¿Qué pasa con Santa Fe? El cardenal extravió su libreto de equipo grande. Pasó de luchar por títulos, locales e internacionales, a no caer en zona de descenso la próxima campaña. Estas son las grandes debilidades del león, que ya no ruge ni hace daño a sus rivales:
- Mentalidad. La camada de jugadores que fueron campeones en Colombia, a nivel continental y hasta intercontinental, tenían esa hambre de gloria que los llevó a reescribir la historia del equipo. Ahora, hay un grupo de jugadores con miedos, desconfianza, algunos ya cansados, otros nerviosos por su corto recorrido. La cabeza juega un papel muy importante, y en estos momentos no hay calma, mentalidad ni tranquilidad.
- Juego aéreo. Si alguna arma era reconocida en Santa Fe era su poder en la pelota quieta, el juego aéreo, la anticipación al rival. Eso se perdió y se debe recuperar. Los laterales están centrando mal, con balones a los tobillos, a la cintura, a las manos de los arqueros rivales, o tal lejos que pasa a ser un cambio de frente perdido. Los tiros de esquina también carecen de precisión, y en el área no se están coordinando los movimientos de distracción y ataque a la pelota.
- Los fichajes. Santa Fe contrataba jugadores de proyección, goleadores con actualidad, mantenía además una base de esos equipos campeones. En el último tiempo, vendió a sus principales figuras, trajo algunos referentes venidos a menos, y contrató mal, jugadores que no están acostumbrados a ganar, con malos antecedentes o sin nivel.
- Goles. El gran talón de Aquiles en la actualidad, pues no se les ha abierto el arco a los jugadores, no solo a los delanteros. Sin embargo, se extrañan a hombres como Wilson Morelo, Jonathan Gómez y otros, que años atrás marcaban diferencia en el arco contrario. En el último tiempo, además, se han traído extranjeros en ataque que no han dejado nada, ni goles.