Gustavo Murillo tuvo una difícil noche este jueves en el partido entre Nacional y Tolima, por la segunda fecha del cuadrangular B de la Liga I-2019. El juez sancionó un penalti a los 18 minutos del partido porque él vio una mano de Alexis Henriquez dentro del área.
Aunque los jugadores del verde protestaron dicha decisión del juez, Murillo no echó para atrás su decisión y se mantuvo en la sanción del penalti que terminó en el primer gol del conjunto pijao contra Nacional.
Desde allí, el juez recibió múltiples insultos hasta el final del partido, pues lo aficionados del verde no estaban de acuerdo con sus decisiones dentro del terreno de juego.
Al finalizar el partido, Murillo y su cuerpo arbitral salieron del estadio escoltados por la Policía y en medio de los insultos de los aficionados que aún rondaban el estadio Atanasio Girardot.
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— Múnera Eastman Radio (@RadioMunera) 17 de mayo de 2019
Así se retiraba Gustavo Murillo y su equipo arbitral del Atanasio #LigaAguila pic.twitter.com/iq4BuZcNNL