El temor de todos en medio del agrio conflicto que mantienen Atlético Nacional y Cortuluá por el traspaso de Fernando Uribe, se ha confirmado: la FIFA acusó recibo y sigue al detalle el conflicto.
La noticia es buena y mala, según se quiera ver: en la acera verde quieren verlo como una buena señal, porque significa que tienen atención para su causa, pero es la misma visión de Cortuluá, el club que espera que se pague la deuda de 5 millones de dólares. Pero en la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) es definitivamente una mala señal.
"Hubo (de parte de Ramón Jesurún, presidente de la FCF), lo pueden tomar como un regaño, palabras fuertes de parte del presidente de la Federación al doctor Emilio Gutiérrez, presidente de Nacional. Por lo que está haciendo Nacional para dilatar el tema del pago al Cortuluá y, además, por haber ido a la justicia ordinaria", dijo el periodista Fabio Poveda en Blu Radio.
¿La razón? Una llamada de Gianni Infantino, presidente de la FIFA: "Infantino, presidente de la FIFA, conversó con Ramón Jesurún al respecto. Es decir, indagó qué está pasando, cómo es esto. A raíz de esa llamada, hubo palabras muy fuertes del presidente de la Federación al presidente de Nacional", añadió.
La llamada habría buscado entender la razón por al cual la disputa pasó por el Tribunal Arbitral Superior del Deporte (TAS) y necesitó de la intervención del Tribunal Federal Suizo para anular el fallo del máximo organismo judicial en los temas del deporte.
La preocupación es que los estatutos de la FIFA dice de manera explícita que se exponen a la desafiliación los clubes y federaciones que terminen resolviendo sus diferencias en la justicia ordinaria y que no cumplan con los reglamentos internos para la solución de los conflictos.
La situación entre ambos clubes sigue siendo muy tensa, después de la imposibilidad del verde de inscribir a sus refuerzos el pasado viernes, cuando se venció el plazo indicado, hasta que no pague la millonaria deuda.