El jefe pierde plata y todos saben que, cuando eso ocurre, alguien tiene que pagarlo.
El jefe se llama Jim Ratcliffe y lo que hace unos meses le pareció un tremendo negocio, de repente se le convirtió en un quebradero de cabeza.
El empresario compró, en diciembre de 2023, el 27,7 por ciento del United por una cantidad cercana a los 1.480 millones de euros.
Pero los resultados han sido más que pobres, primero con Ten Hag y ahora con Amorim, y ese dinero que no ingresó tuvo un impacto directo: según la lista de multimillonarios del "Sunday Times", , perdió cerca de un cuarto de su riqueza en el último año.
Significa que su patrimonio pasó de 27.900.000 millones de euros a unos 20.240.000 millones de euros, con lo cual ya no es el cuarto sino el séptimo en la lista de los grandes millonarios del Reino Unido.
Alguien tiene que pagar por la pérdida
Ratcliffe, quien además es dueño de la empresa química INEOS, a su vez dueña del equipo de ciclismo del colombiano Egan Bernal, ha tomado la decisión de muchos adinerados cuando no facturan lo que esperan: despidos masivos.
Según los informes desde Inglaterra, los 'diablos rojos' llevan cinco años de pérdidas y un desangre económico que se intenta frenar por la vía de aliviar la nómina, so pena de acabar, al parecer este mismo año, en bancarrota.
En el último año ya más de 400 trabajadores han perdido sus empleos y los que quedan han perdido privilegios como la opción de comer en el club o viajar a las finales que dispute el equipo. Eso sí, se siguen dando lujos como la indemnización a Erik Ten Hag, que fue millonaria, la llegada de Amorim, que también llegó a cambio de una fortuna, y la contratación del director deportivo, quien según rumores habría costado unos 20 millones de euros. ¿Qué tanto, en realidad, se están ahorrando?
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