Tolima fue el equipo que más le apostó al ataque y tuvo como premio ser el único que marcó gol en esta semifinal y viajar con victoria (1-0) a Medellín, donde enfrentará al poderoso para buscar el cupo a la final.
Al final del encuentro, Alberto Gamero presentó su satisfacción por el buen juego de su equipo, que controló al rival y fue arrollador en el frente de ataque.
Sin embargo, a pesar de las buenas aptitudes ofensivas de su equipo, hubo un ítem deficiente en el cuadro pijao, pues en esta oportunidad no tuvo buena definición y dilapidó importantes opciones de gol, que hubieran servido para tener una mayor ventaja en el marcador.
Ángelo Rodríguez, Yohandry Orozco, Marco Pérez, Omar Albornoz fueron jugadores que aportaron con su velocidad y potencia en el frente de ataque, pero no fueron certeros frente al arco de David González.
Según el entrenador samario, los pijaos mantendrán esta misma actitud para el partido de vuelta y frente a esto deberán mejorar su definición, pues en las demás fases del juego controlaron el balón y al rival y eso los tiene con un pie en la final de la Liga I-2018.