El equipo verdolaga salió con una idea clara: sacar la victoria desde el primer minuto, con un planteamiento muy dinámico y ofensivo en la zaga siendo sólidos con dos laterales que eran solidarios en defensa y trataban de sacar el equipo adelante.
Todo le estaba saliendo al profesor Jorge Almirón cuando en el minuto 21, producto de un trabajo colectivo tanto como jugada en movimiento táctico por parte de Vladimir Hernández y Dayro Moreno, quienes arrastraron marcas para que Andrés Rentería tuviera la precisión de un atacante en racha. El 1-0 impulsó mucho más a un Nacional que siguió atacando con fuerza, moviendo las líneas del equipo embajador pero sin esa efectividad que los puso arriba en el marcador.
Volviendo al medio campo, Diego Arias quería salir jugando y someter a Millonarios en su cancha, por momentos lo consiguieron, pero con el pasar de los minutos y tras no aumentar la ventaja, los pases entre él y los extremos, Rentería y Stiven Lucumí, terminaban en balones para el rival, quien tampoco aprovechaba con claridad.
La línea de centrales intentaron salir jugando pero les faltó ser sólidos en el marcaje. Tal como en la ida, Roberto Ovelar tuvo una jugada en el primer tiempo que lo dejaron recibir y darse vuelta para decretar el empate parcial.
Entre los centrales, Carlos Cuesta no tuvo su mejor partido, no estuvo preciso en los pases hacia el arquero Fernando Monetti y muchas veces dejaba desprotegido a su equipo. Así fue como Roberto Ovelar aprovechó uno de sus descuidos para dejar el 2-1 definitivo.
Tras el gol, Nacional no supo volver a tomar los hilos del partido, se mostró desorientado, queriendo llegar por los costados pero sin ser tan contundente como en los minutos inciales. Sumado a la salida de Vladimir Hernández, el técnico argentino le quitó un dolor de cabeza a los embajadores que pudieron tener más calma y autoridad para dominar las acciones.
El ingreso de Gustavo Torres fue más caras largas que alternativas, el caucano apenas se pudo concentrar en un par de llegadas que por poco terminan en el empate de Nacional.
En líneas generales, Nacional tuvo unos 25 minutos iniciales muy buenos y 65 para reflexionar, las intermitencias no solo cuestan copas como esta noche, pueden terminar procesos que hasta ahora se están viendo con buenos avances.
Juan Camilo Álvarez
Corresponsal Futbolred
Medellín
Los verdolagas no tuvieron un buen inicio de año.
Foto: EFE
