Finalmente, tras las incertidumbres, Bogotá y El Campín fueron escogidos por el Deportivo Pasto para jugar la final de vuelta de la Liga I-2019 contra Junior. El conjunto barranquillero sumó una victoria en el encuentro y triunfó por 1-0. Una fortaleza, obligada, es el tema de la altura para el equipo volcánico.
Junior está acostumbrado al clima caliente. Bogotá, en su historia, ha sido una de las ciudades que más le ha pesado al conjunto barranquillero; principalmente por su altura.
2.600 metros al nivel del mar complican al cuadro de Julio Comesaña. Pasto, por su parte, se acostumbró este semestre a los 2.900 metros que tiene Ipiales. Además, el clima frío, siempre ha permanecido en su esencia.
Y los números se ven reflejados durante el semestre. Pasto, en la altura, logró empatar por 1-1 contra Santa Fe y perdió 1-0 con Millonarios. Contra Once Caldas, en Manizales, el club volcánico también pudo llevarse la victoria en una plaza que tiene altura; ganó por 0-1.
Sin embargo, Junior perdió 2-0 contra Millonarios e igualó con Santa Fe y La Equidad. El clima frío bogotano podría ser un factor que beneficie a Pasto y complique a Junior.
Con un resultado tan corto, por 1-0 a favor de los barranquilleros, Pasto puede dar la sorpresa y aprovechar esta obligada fortaleza en Bogotá para buscar su segundo título. El partido, este miércoles a las 7:45 p.m.
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