Al cumplirse un año desde la puesta en marcha de los turnos de racionamiento, el Distrito entregó el balance de esta estrategia de emergencia.
El alcalde Carlos Fernando Galán, junto con Natasha Avendaño, gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá, lideraron la presentación de los resultados.
Se destacó que “el embalse de Chuza hoy está por encima de lo que estuvo en los años 1998, 2005, 2006, 2007 y 2024”.
El sistema Chingaza, conformado por los embalses de Chuza y San Rafael, también muestra niveles por encima de los registrados en 2019 y 2024, y muy cercanos a los de 2007 y 2014.
Durante el año de restricciones, el consumo promedio se redujo de 17,72 a 16,24 metros cúbicos por segundo. “46.563.898 de metros cúbicos ahorrados que equivalen a 18.625 piscinas olímpicas”, según el balance oficial.
Solo en abril de 2025 se acumularon 10,5 millones de metros cúbicos en Chuza, gracias a las lluvias y al comportamiento ciudadano.
Actualmente, el sistema Chingaza cuenta con más de 118 millones de metros cúbicos almacenados, “lo que equivale a cerca de 9 millones de metros cúbicos por encima de la curva guía”.
Las autoridades fueron enfáticas en que sin esta estrategia iniciada en abril de 2024, Bogotá y 11 municipios de Cundinamarca podrían haber enfrentado un grave desabastecimiento de agua.