Hace casi un año que Iker Casillas conmocionó al mundo por un ataque al corazón, la eventualidad tomo por sorpresa al fútbol pero afortunadamente no ocurrió algo terrible.
A día de hoy, el futbolista español se recupera en casa, sin saber si continuará como futbolista activo y aprovecha la cuarentena obligatoria para compartir con sus seres queridos.
En diálogo con el programa ‘FC Oporto en casa’. Iker aseguró que los días posteriores al infarto fueron muy duros, pues en aquel entonces pasaba un gran momento con su club. “Estuve triste durante aproximadamente un mes, tenía miedo de caminar, dormir y hacer algún esfuerzo físico. Era imposible”.
Reconoció que actualmente se encuentra bien de salud, recuperándose sin dar una fecha de vuelta y siendo consciente de que “lo más importante es mi salud”. Respecto al fútbol, declaró que “solo los médicos pueden decir lo que puedo o no hacer”.
Por último resaltó que aquel acontecimiento le ayudó a “valorar más los momentos”. “A veces los jugadores no valoramos lo que tenemos y no creemos que podamos hacer felices a mucha gente y eso ha cambiado un poco”, sentenció.