No parecía que llegaría el día, pero llegó: James Rodríguez, el dueño de los elogios en la prensa de Inglaterra, terminó rajado y criticado en Everton, tras el sombrío empate 0-0 en casa de Brighton.
Y no parece tan critico sumar en un torneo tan duro como la Premier League, pero es que la prensa local sabe, como nadie más, que cuando no puedes ganarle en casa a un Crystal Palace (puesto 13) ni por fuera a un Brighton (15), es imposible soñar con puestos europeos. Por eso en este punto se ponen más exigentes, menos comprensivos, menos tolerantes.
Por eso tras el 0-0 de este lunes, a James Rodríguez -lo calificó el Liverpool Echo con solo 5 puntos.
"Cuando tuvo el balón en su propio campo demostró que los anfitriones eran conscientes de su peligro y lo anularon a la perfección. Poco de lo que intentó salió bien", dijo el medio. Poco que agregar para un partido sin la mitad del brillo del último duelo en Goodison Park, cuando volvió de lesión.
James fue uno de los cuatro rajados en este duelo, junto a Keane, Sigurdsson e Iwobi, este último desde el minuto 57 en la cancha, por el lesionado Mina.
De Kean dijeron que "no fue su yo habitual", del islandés que ."no se metió lo suficiente en la disputa por la pelota ni buscó jugar a través de las líneas" y de Iwobi que "ofreció poco".
James estuvo incluso por debajo de la calificación de Mina, a quien le dieron 6 puntos por una razón clara: "Un excelente bloqueo de Neal Maupay detuvo un gol casi seguro. Pareció el más seguro de los tres central-defensivos, pero se fue lesionado al principio del segundo tiempo", dijo el Echo.
El crédito hay que revalidarlo partido a partido y no es nada nuevo para James. El tema es que ahora vienen Tottenham y Arsenal y no vino el baño de confianza que se esperaba a esta altura.