James Rodríguez volvió a los entrenamientos con el Olympiacos, en medio de la pausa mundialista de la gran mayoría de las competiciones del mundo. Ante esto, el panorama del colombiano le apunta ahora a la Copa de Grecia, donde regresarán a competición, el próximo 15 de diciembre.
Los griegos ya arrancaron los duelos amistosos, en medio de la ausencia de algunos jugadores y adelantando trabajos. Recientemente, disputaron un compromiso contra el Huddersfield, donde los británicos se impusieron 2 a 0.
Pese a que James no estuvo en este partido, el colombiano está en buena forma y entrenándose con normalidad junto a sus compañeros. Las imágenes que Olympiacos revela acerca de sus prácticas, revelan el buen estado del jugador colombiano.
Sin embargo, durante un entrenamiento con sus compañeros, el colombiano mostró evidentemente su molestia. Durante un partido entre ellos, el equipo rival de James anotó un golazo, picando la pelota por encima del portero. Casualidad o no, el colombiano en ese instante se deshizo del esqueleto que tenía puesto, con visibles signos de fastidio.