La tentación y el riesgo son igual de grandes: Everton enfrenta a West Ham en su casa por los octavos de final de la Carabao Cup (1:45 p.m. hora colombiana) y tiene ante sí la opción de seguir vivo en un torneo que reparte premios importantes pero también el riesgo de ser eliminado y repetir la amarga historia que acaba de escribir el Chelsea.
La duda del técnico Carlo Ancelotti es clara: usar a James Rodríguez y a los estelares refuerzos de la temporada para asegurar una victoria en un torneo que bien puede ser el 'premio gordo', o confiar en 'la unidad B' una responsabilidad gigante que haga que todos se sientan importantes.
Y es que James, la gran figura en el inicio fenomenal en la Premier League, con 9 puntos de 9 en juego, es una tentación permanente. Pero también los son Allan y Doucouré, los otros estelares refuerzos que son la columna vertebral de este inicio soñado de la temporada.
¿Por qué sí arriesgar a James y a los titulares en la Copa?
Es la razón de la preocupación de Ancelotti. Vale recordar que el ganador de la Carabao Cup tendrá acceso a la fase previa de la Europa League, lo que no es un detalle menor para un equipo como Everton, que pasó la temporada pasada lejos de esos puestos y era su gran objetivo (acabó en el puesto 12).
Los refuerzos son lo que puede llamar 'víctimas de su éxito', pues sus prestaciones en Premier los convierten en candidatos. Hasta ahora solo Doucouré fue convocado contra Fleetwood Town, pero Allan y James podrían dar una mano ahora que llegan lo cuartos de final.
West Ham es un rival exigente y habría que enfrentarlo con las mejores cartas disponibles. De hecho, una prueba de la necesidad de usar una nómina competitiva la acaba de dar Tottenham: enfrentó a Chelsea con equipo mixto desde el vamos pero sufrió mucho para igualar y acabó necesitando a varios de sus estelares, Kane incluido, para imponerse al final en definición por penaltis.
¿Por qué No usar a James y a los refuerzos?
El primer argumento es el calendario: si James, Doucouré y Allan juegan este miércoles, apenas tendrían tres días de recuperación antes del duelo contra Brighton, un duelo que necesita sortearse con victoria pues llevaría al equipo de Ancelotti al clásico contra Liverpool con pleno de victorias en la Premier.
Es cierto que faltarían 16 días para el derbi en Goodison Park, pero no hay razón para arriesgar físicamente a los fijos de la Premier, especialmente a un James que viene de dos temporadas con importantes problemas físicos que, por fortuna, no han aparecido en este rutilante estreno en el fútbol inglés. No habría que tentar a la suerte...
El otro asunto que baraja Ancelotti es su manejo del vestuario en estas instancias en las que Walcott y Gordon han levantado la voz por otros que han perdido protagonismo con la llegada de los refuerzos.
¿Cómo explicarles a Gylfi Sigurdsson, Bernard y Alex Iwobi que después de cumplir en las fases previas del torneo ya no serán titulares? Incluso al propio Gordon se le cerraría la puerta y ha demostrado que es una gran alternativa viniendo desde el banco. Eso por no mencionar a Delph, de gran estreno en Premier y quien no fue convocado contra Crystal Palace para estar disponible contra West Ham... ¿vale la pena crear esa molestia?
Para un hombre hábil y experimentado, tres veces campeón de Champions, ese no es un error que se pueda cometer: si confía en su 'unidad B' se sentirán todos importantes, el vestuario recobrará armonía y de paso los habituales no tendrán que forzar en lo físico con una pretemporada corta y un calendario exigente por delante.
Por eso lo mejor sería, como se anticipa desde Liverpool, convocar a James, Allan y Doucouré pero solo usarlos en caso de emergencia... y eso. En ataque sí estarían los hombres clave de gol, Calvert-Lewin y Richarlison y si acaso se harían pruebas en defensa, con un Yerry Mina que necesita competencia para mejorar la toma de decisiones en situaciones de riesgo, lo que aliviaría la carga de Digne, y en un caso extremo improvisar en el arco a Jonas Lossl ante los errores de Pickford... lo que es un riesgo demasiado alto a esta altura de la Carabao Cup.
Según el diario Liverpool Echo, una formación ideal sería con Pickford, Kenny, Keane, Mina, Nkounkou; Sigurdsson, Delph, Bernard; Iwobi, Calvert-Lewin, Richarlison. No estaría James, pero la nómina luce competitiva. Ahora la decisión es toda del sabio Ancelotti.