En el Camp Nou se exhibió el visitante... y qué visitante. FC Barcelona cayó goleado y se fue de la Copa del Rey a manos de un Real Madrid exultante, un Benzema inspirado y un 0-4 que no da lugar a ninguna duda.
Llegaba con todo en contra el equipo de Ancelotti: perdía la llave 0-1, ardía el Camp Nou, entre otras cosas pidiendo el regreso de Messi, enfrentaba al que parece encaminado al título de LaLiga... Pero las finales son las favoritas de los blancos, no importa cuándo ni en qué torneo lo digas.
El chaparrón local duró unos diez minutos, de la mano de un Gavi inquieto al que le faltó mejor sociedad con Lewandowski. Pero poco a poco fue recuperando la pelota el Madrid y tejiendo con paciencia el primer tanto para igualar la llave, ese que llegaría a los 45 minutos, en un gran contragolpe que dirigió Benzema, preciso
centro a Vinicius y 0-1 en el Camp Nou.Se dice fácil, pero cuánto costó.
Y el complemento fue un poco más de lo mismo pero más breve la intensidad del local, mientras que el Madrid se fortaleció, con los mismos veteranos de siempre, y pasó derecho: a los 50 minutos se inventó una genialidad Modric que mejoró con su definición Benzema para el 2-0 y el mismo francés, a los 58, cambió por gol una clara falta en el área y de penalti puso las cosas 0-3. Final de la serie.
No se levantaría más de la loba el Barcelona, que tuvo una opción clara de descontar salvada por Courtois y pare de contar. Era demasiado peso para darle vuelta y ya era cuestión de administrar... Mentiras, no pasa eso
cuando Benzema está en la cancha y Vinicius tiene ganas de jugar...
Magia pura fue la jugada de Vinicius en un doble toque y un pase a Benzema que definió el francés como solo él sabe: triplete personal, cuenta 0-4. Adiós Barcelona de la Copa del Rey, saluden al rival del Osasuna en la gran final. Ganar es eso que le pasa al Madrid cuando Benzema tiene ganas de celebrar...