El entorno de Junior de Barranquilla está a la expectativa de lo que ocurra en los octavos de final de la Copa BetPlay contra Cúcuta Deportivo, donde está con el marcador en su contra y la obligación de remontar y meterse en la siguiente fase.
Las cosas no andan de la mejor manera, menos lo que esperaban directivos y aficionados, pues los resultados en Liga son para llamar la atención. Además, la tensión va más allá de lo deportivo, que ha desembocado en la relación con Hernán Darío Gómez, fuertemente criticado en el Metropolitano.
Ante esa situación, las directivas de Junior analizan todo lo que ocurre, buscando alguna clase de explicación. En entrevista con Blu Radio, el director general del club, Héctor Fabio Báez, sorprendió con sus declaraciones.
El directivo puso un ejemplo claro, para empezar a analizar a los jugadores que traen, teniendo en cuenta lo que representa el ambiente de Barranquilla “Cuando un chico gana dos millones, todos dicen que es bueno, es buen muchacho. Le ponen 20 millones de pesos y lo perdieron seis meses. Acá los jugadores ganan muy bien y algunos no saben manejarlo. Yo les tengo un discurso cuando llegan, de que es Junior y demás. Espero que en noviembre me hayas hecho caso, algunos llegan a ese mes con la carta de no renovación y me miran: ojalá te hubiera hecho caso”.
Agregó “Por eso incluso, estamos buscando que el jugador venga casado. Al soltero le cuesta, si es así, quien le cocina, donde vive, cómo vive. Hay chicos que inician y no tienen un aire acondicionado, no tienen un buen colchón. Son cosas mínimas, pero tienen que ver con el desempeño del jugador”.
También se refirió a lo que puede pesar en la cabeza del jugador, en el entorno de Junior y Barranquilla “Es un tema que hemos analizado. Se dice que traemos jugadores para equipos chicos y no grandes, hemos traído muchos. Digo que la camiseta de Junior pesa 20 kilos más. Tú ves el partido de Pasto y América y Pasto salió a atacar, pero en Barranquilla ‘arratonado’ escondido, ves a Bucaramanga jugando de tú a tú contra Nacional, pero contra Junior, escondido. La ciudad es compleja, los aspectos climáticos”
“Acá hay que adaptarse a la buena hidratación, si un jugador no tiene buena alimentación y descanso, lo sufre en el Metropolitano, ahí se desnudan esas falencias. Además tiene tres metros debajo del nivel del mar. Tu no sientes el viento” complementó.
Báez enfatizó en el tema de la presión que siente el futbolista “El jugador debe tener muchos cambios, sus medios son exigentes, la gente no tiene paciencia. El presidente me decía que estaba impresionado viendo a Cetré tan tranquilo pateando penales, acá era una locura. El jugador acá juega con angustia. Aquí van 10 minutos del partido y dicen que se vayan todos”.
Concluyó con esa reunión que tuvo el entrenador con los dueños del equipo, como de costumbre, para analizar los problemas del equipo “Normalmente después de cada partido, Fuad o Antonio cita al entrenador o cuerpo técnico. Ayer fue tranquilo, mirando la evaluación del partido del Pasto, lo positivo y negativo, lo proyectado contra Cúcuta. El profe está tranquilo, pero quizás está apenado con la dirigencia, quienes han sostenido el apoyo pese a los resultados”.