Atlético Bucaramanga está en la final de la Liga Betplay I 2024 por dos razones principales: su victoria contra Pereira en la última fecha de los cuadrangulares (3-1) y la victoria de Millonarios por 2-0 contra Junior.
Fue esa combinación lo que hizo que todos los equipos del cuadrangular A igualaran en 8 puntos y les permitieran a los 'leopardos', amparados por el llamado 'punto invisible', la ventaja deportiva que hacía que todos los que le igualaran en ese ítem perdieran, porque valía el hecho de haberse clasificado primero.
La cuenta parecía casi imposible pues el equipo de Leonel Álvarez tenía la prelación, Junior debía ganar y esperar a que hubiera empate en el Alfonso López y solo Millonarios llegaba sin opción. Y fue al azul al que le apostó el sorprendente técnico Rafael Dudamel.
"Estaba muy convencido que ese resultado era viable (la victoria azul en Bogotá). Lo marcaban las estadísticas históricas. Además Millonarios, como equipo grande y por su profesionalismo, no podía darse el lujo de perder dos partidos seguidos, es extraño verlos en esa situación. Lo primero que les dije a mis dirigidos era que no podíamos darnos de lujo de no ganar porque seguramente en Bogotá iba a darse el resultado que necesitábamos. Así sucedió", dijo en Equipo F de ESPN.
En esa jerarquía del técnico y los jugadores siempre confió: "Millonarios no podía cerrar mal la campaña pero esto habla muy bien de la Liga de Colombia. Son partidos peligrosos, afortunadamente no ha pasado nada pero podría haber pasado mucho. Está claro que Millonarios venía de sufrir la eliminación de Libertadores y no había mejor manera de limpiar su imagen que ganando su último partido".
Así que mientras muchos se 'han bajado del bus' de Gamero y los suyos por cuenta de un 2024 para el olvido, los rivales aún confían en la capacidad de Millonarios para salir de su bache. Al final, el que cree suele ser el más inesperado.