Jair Palacios, exjugador de Millonarios, confesó cómo salió de sus problemas de adicción donde mezclo alcohol y drogas que por poco acaban con su vida, pues los falsos amigos y el descontrol lo llevaron a ese cruel mundo donde pocos son los que salen. Hoy es ejemplo tras superar ese bache y que lo dejó sin poder terminar con creces su carrera como futbolista profesional.
Sin embargo, el caso de Jair Palacios no ha sido el único confirmado, pues en Colombia han existido varios jugadores que han dejado de lado el fútbol profesional tras ser atraídos por el mundo oscuro de las drogas y el alcohol, terminando así con una carrera que pudiese ser exitosa.
Uno de los casos más recientes de confesiones de jugadores colombianos es el de Freddy Guarín, quien hace poco confirmó que sufrió serios problemas de alcohol, reconociendo que fue lo peor que apareció en su vida personal, pues el exceso lo llevó a cometer errores con sus seres más cercanos, además de perder oportunidades de crecimiento en el fútbol. Su último club fue Millonarios y tuvo que retirarse tras tener un bajo nivel futbolístico a causa de sus problemas personales.
Otro de los más sonados han sido el del delantero Wilder Medina, quien durante varias etapas de su vida deportiva jugando para Deportes Tolima y en algunas oportunidades en Santa Fe, reconoció haber tenido problemas con drogas psicoactivas, luego de que varias pruebas antidoping le salieran positivas y que a la postre terminó de alejarlo del fútbol profesional. Hoy en día sigue jugando de manera aficionada y dando charlas de superación a aquellos que tienen los mismos problemas por los que pasó.
Siguiendo en ese mismo hilo, otro de los jugadores colombianos que se perdieron del mapa fue el delantero Johan Arango, quien no superó sus problemas de la noche llenos de alcohol y hasta el día de hoy sigue perdido del fútbol profesional, pues su último club fue Jaguares en el primer semestre de Liga BetPlay, pero no volvió a reaparecer en escena, pues sus constantes fallas de indisciplina lo han alejado de la élite.
Luis Quiñones ha sido otro de los jugadores que mientras estuvo en Colombia, vivió varios episodios llenos de polémicas donde el alcohol y la noche se apoderó de él. Dejándolo varias veces mal parado, confirmando así su adicción. Sin embargo, sigue vigente en el fútbol mexicano, saliendo figura, pero su nivel ha decaído y en ese territorio también se ha visto envuelto en problemas serios de indisciplina.
Así las cosas, la noche, fiesta y diversión ha sido el detonante para algunos futbolistas colombianos, quienes en su mayoría han trucando su progresión y éxito en sus carreras, por darle prioridad a sus aficiones con las drogas y el alcohol.
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