Un 3 de abril pero del 2019, Boca firmaba una de sus peores presentaciones como visitante, en la Copa Libertadores. Atlético Paranaense fue el victimario y Marco Ruben su verdugo.
El atacante argentino tuvo aquel día una noche de ensueño, mostró su poderío goleador y le dio los tres puntos al equipo, en aquel entonces, venía de coronarse en la Copa Sudamericana frente a Junior
El ex-Rosario Central abrió la cuenta en el minuto 35 de la primera parte, tras un grosero error en salida de Bendetto. El segundo lo anotó al 23 de la segunda parte y sentenció el partido a diez del final. El estadio se quería caer.
Finalizadas las fechas iniciales, Boca culminará primero y los brasileños segundos del grupo G. En octavos de final se volverían a encontrar y terminó siendo la revancha del ‘Xeneize’ que ganó la serie por un global de 3-0.
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