Es cierto que Bogotá, a 2.600 metros de altitud, ya es una preparación cuando viene el reto de jugar en Bolivia. Pero no es suficiente.
Por eso Millonarios no ha querido dejar ningún detalle sin resolver y se ha enfocado en tomar todas las precauciones del caso para no sufrir en un partido en el que necesita sumar como sea, sin piezas clave como David Mackalister Silva o Jorge Arias, ambos ausentes por lesión.
La idea del técnico Alberto Gamero es desplazarse en la noche de este lunes a Santa Cruz de la Sierra, que está a menos de 500 metros de altitud, y en esa ciudad hacer las prácticas del martes y el miércoles, antes del partido del jueves en la noche, en la Paz.
A esa ciudad, a 3.640 metros de altura, se llegará un par de horas antes del duelo, programado para las 5:00 p.m. (hora colombiana) para mitigar los efectos climáticos, una práctica que siguen muchas selecciones en Eliminatorias, incluyendo a la Selección Colombia.
Las precauciones tienen una razón y es la amarga experiencia del azul en la Copa Sudamericana del 2020, cuando perdió 1-0 contra Always Ready y sacó figura a Wuilker Faríñez, en un duelo que costó mucho en lo físico y que se resolvió bien en el global (3-0).
Esta vez la idea es traer mínimo un punto, idealmente tres, pues el empate en Bogotá, por mucho que haya sido contra el gigante Flamengo, obliga a recuperarse dominando a alguno de los rivales de visitante.
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