Pasa el tiempo y James Rodríguez empieza a perder la paciencia: ya se resignó a no volver al Real Madrid, ya le dijo Sí al Napoli y a Ancelotti y presionó para que hubiera una oferta formal sobre la mesa por sus servicios... ¿Qué más quieren los 'merengues' para dejarlo ir?
Una única cosa que el colombiano, por más que se empeñe, no puede ofrecer: plata en efectivo. Eso es lo que no quiere desembolsar en un solo pago el equipo italiano y es lo único que le sirve al presidente Florentino Pérez.
¿Por qué tanta urgencia? Por una razón que comparte nacionalidad con el técnico Zinedine Zidane y que además tiene un trofeo de campeón mundial en su vitrina: Paul Pogba.
Según el diario Marca de España, todos los últimos movimiento en la oficina de la presidencia están orientados hacia su fichaje. Ya se cerraron las ventas de Marcos Llorente, Theo Hernández, Raúl de Tomás y Mateo Kovacic y se firmaron préstamos por Luca Zidane, Reguilón y Odegaard, negocios que dejaron en caja 125 millones de euros.
Pero todavía no es suficiente. Según el medio, hacen falta al menos 200 millones de euros más para iniciar una eventual negociación con el Manchester United, que no tiene ninguna intención de facilitar la salida de su jugador estelar.
Por eso es que el Real Madrid tiene urgencia de vender a otros jugadores cuanto antes. Claro, todo se facilitaría si salieran dos o al menos uno de los estelares que fueron declarados transferibles: Gareth Bale e Isco Alarcón. Se trata de jugadores tasados en 80 y 70 millones de euros, respectivamente, lo que permitiría mover la caja con más elasticidad. Pero la realidad es que por ninguno de los dos ha llegado una sola oferta.
El otro transferible era Keylor Navas por quien se esperaba facturar alrededor de 40 millones de euros, que ya no llegarán pues se tuvo que ir el hijo del DT, Luca, precisamente para asegurarle el cupo al costarricense.
De esta manera, en la vitrina quedan tres jugadores: James (45 millones), Lucas Vázquez (60 millones) y Mariano Díaz (30 millones). Entre los tres deben dejar el dinero suficiente para fichar a Pogba. Después, el astronómico salario de 17 millones por temporada se discutirá sin mayor oposición, pues el campeón del mundo está dispuesto a hacer el 'sacrificio' que sea necesario para ponerse a órdenes de su ídolo Zidane.
Así están las cosas. La negativa tajante al Napoli de darle el año de plazo que pide para pagar los 42 millones de euros de la transferencia de James tiene su explicación en Pogba. ¿Arruinará finalmente la transferencia ese radicalismo? El mercado, que todo lo puede, decidirá.