James Rodríguez pasó una página -otra más- de decisiones erráticas a la hora de elegir club y ya ni mira a este lado del mundo.
Pero en Brasil, concretamente en Sao Paulo, aún sigue vivo el sabor amargo de un fichaje que generó la más alta expectativa y terminó en la más rotunda decepción.
El colombiano apenas si se hizo notar y no logró consolidarse aunque tuvo tres entrenadores: llegó con Dorival Jr, pasó por Thiago Carpini y se despidió del club con Luis Zubeldía al mando.
Duro señalamiento
¿Qué pasó? Julio Casares, presidente del Sao Paulo, habló con TNT Sports sobre su insistencia en un jugador muy taquillero y costoso.
"La intención era la mejor (el fichaje de James) porque lo que juega en la selección, si jugara el 70 por ciento aquí en el club sería un gran jugador, ese tipo de centrocampista que tanto falta en el fútbol. Hicimos el movimiento correcto y, como dije, esto sucede, no todos son capaces de adaptarse, no todos son capaces de cumplir siempre en un lugar u otro", dijo.
A su llegada, en 2023, también Dorival Jr señaló que la razón de todos los clubes para ficharlo es su dimensión cuando juega en la Selección Colombia, pero ha sido la constante que ninguno logre replicar ese nivel en el trabajo diario de los clubes.
"En la selección, conoce las características de todos sus compañeros y él está en la Selección Colombia hace muchos años. Con certeza, todos esos encuentros mensuales terminan facilitando las cosas para un jugador de alto nivel. Es un jugador que en la selección se adapta perfectamente a las características que James posee y se le da muy bien", decía el actual DT de la selección de Brasil.
Así que van todos tras una utopía que solo es real en la Selección Colombia. ¿Será eso lo que quiere evitar Íñigo Pérez en Rayo Vallecano? Ojalá no... pero los antecedentes le juegan en contra al 10.
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