El futuro de Fredy Guarín sigue en el limbo aunque no le faltan pretendientes, empezando por el Vasco da Gama, donde terminó el año 2019.
El colombiano tuvo buenas presentaciones que agradaron al cuerpo técnico, pero la realidad es que la prolongación de su contrato no obedece solo a razones deportivas sino también económicas.
Aunque los agentes del jugador trabajan en un acuerdo, por ahora no hay avances: "Con un contrato rescindido, el club tiene interés en mantenerlo, pero el colombiano solo acepta iniciar negociaciones después de recibir sus salarios atrasados", explicó Globoesporte.
El medio asegura que el mundialista con Selección Colombia bajó sus pretensiones salariales para jugar tres meses en el club brasileño, con la intención de facilitar la negociación: "Contratado a fines de septiembre, con un breve contrato de tres meses, Guarín acordó recibir valores más bajos, pero espera que se mantenga un ajuste", añadió el citado medio.
El futuro sigue sin ser claro para el Vasco da Gama, que apenas ha logrado cerrar una contratación en la temporada, la del argentino Germán Cano.