La Selección Colombia prepara en España los amistosos de este viernes, contra Irak, y el 20 de junio, contra Alemania. Lo hace con quienes el técnico Néstor Lorenzo considera los mejores hombres a disposición, aunque la estadística diga otra cosa.
El DT ha citado a los delanteros Diego Valoyes (Talleres), Jhon Arias (Fluminense), Luis Díaz (Liverpool), Mateo Cassierra (Zenit), Rafael Santos Borré (Eintracht Frankfurt) y Yáser Asprilla (Watford). Ninguno, hay que decir, con el rendimiento de otros atacantes que terminaron la temporada con números claramente mejores.
Hay que empezar por lo más insólito: Jhon Córdoba. En su segunda temporada con Krasnodar disputó 37 partidos, marcando 21 goles y repartiendo 10 asistencias, lo que implica una participación directa en 31 tantos de su equipo.
En el cierre de su año acabó disputando la final de la Copa de Rusia, que perdió en definición por penaltis contra CSKA de Jorge Carrascal, aunque anotó de cabeza en los 90 (1-1). En términos de goles e influencia es, nada menos, que el delantero colombiano más efectivo de todos los que actúan en Europa.
Y no es el único caso: Julián Quiñones, del Atlas de México, tiene una asombrosa temporada, que aún se mantiene en curso, como el segundo atacante más influyente, con 21 goles y 3 asistencias.
Está también el caso de está el caso de Ángel Torres, del Balzan FC de Malta, quien cierra el podio con 16 goles y 6 asistencias. Y valdría mencionar también a Alfredo Morelos, de Rangers, quien hizo 12 goles en 35 partidos en las competencias locales de Escocia, aunque vale decir que no le ayuda estar sin equipo, debido al vencimiento de su contrato.
Por odiosa que suene la comparación, vale decir que Cassiera llega con 5 goles y 7 asistencias en 31 partidos (promedio de 0.16) y que Borré sumó 3 goles y 4 asistencias en 47 partidos (promedio de gol de 0.6), ambos lejos del promedio de Córdoba (0.57). ¿Razones? Solo Néstor Lorenzo las conoce.
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