Kyle Walker, jugador del Manchester City, protagonizó un escándalo extrafutbolístico en Inglaterra, según contó el medio inglés 'The Sun'. El futbolista habría roto la cuarentena para invitar dos prostitutas a su casa, junto con un amigo.
La fiesta sexual se extendió en la noche y, finalmente, una de las mujeres habría sido quien dio la información al medio británico, que reveló la polémica en el país europeo. También, contó que les pagó 2.500 euros a cada una.
“Es un hipócrita y pone a las personas en riesgo (...) Trabajo con una agencia en Manchester. Recibí un mensaje de mi jefe que decía que un cliente de alto perfil estaba buscando a alguien con clase. Tomé un taxi desde Manchester a la dirección y un conductor me recogió afuera y me llevó a las puertas de su departamento. Entonces su amigo salió y me conoció. También había otra chica en el auto. No sabía quién era él hasta que mi amiga me lo dijo, que era jugador de fútbol ”, aseguró Louise McNamara, la joven que accedió a unirse a una fiesta sexual que organizó el jugador.
Por otro lado, la mujer dejó una reflexión debido a que el día siguiente (los hechos ocurrieron el pasado martes) el futbolista del Manchester City publicó un video pidiendo a las personas que se quedaran en casa por la pandemia que afronta el mundo.
“Kyle realmente debería saberlo mejor. Por un lado, está invitando a extraños a su casa a tener relaciones sexuales, y al día siguiente está dando conferencias a todos sobre la necesidad de mantenerse a salvo. Es un hipócrita y pone a las personas en riesgo”, dijo.
Finalmente, Walker decidió emitir un comunicado pidiendo disculpas públicas. Hasta el momento, el City dejó entrever que habrá una sanción para el futbolista del club de los ciudadanos.
“Quiero aprovechar esta oportunidad para emitir una disculpa pública por lo que ocurrió la semana pasada. Entiendo que mi posición como futbolista profesional conlleva la responsabilidad de ser un modelo a seguir. Como tal, quiero disculparme con mi familia, amigos, club de fútbol, seguidores y el público por decepcionarlos (...) Mis acciones están en contraste directo con lo que debería haber estado haciendo con respecto al confinamiento”, dijo el inglés.