Lo lindo de la Premier League es que se hacen pedazos los pronósticos en cada duelo, que en el propio transcurso de los partidos se pasa de la euforia a la angustia, se sufre.
Así lo reivindicaron Chelsea y Arsenal, que intercambiaron golpes de lo lindo en el partido de las palomita en Premier League, que no decepcionó en absoluto. El 2-2 fue justo pero totalmente inesperado.
Se jugó casi un tiempo para cada contendor. El primero para los azules, que abrieron la cuenta a los 14 minutos, aprovechando una inocente mano de Saliba que Palmer cambió por gol en el penalti. No se escondió Arsenal, que pudo empatar en doble intento de Gabriel Jesus, o pudo acusar otro golpe en un tremendo remate de Gusto.
Siguió derecho el local a los 48 cuando Mykhailo Mudryk metió un zurdazo inatajable al pase de Gallagher que ni soñó semejante definición.
Pero el cansancio, tras un partido muy desgastante, y los buenos cambios de Arteta empezaron a hacer mella en los de Pochettino, hasta que a los 77 les cobró Declan Rice, quien sacó un remate de derecha para el descuento, con mucho tiempo por delante para soñar.
Se cumplió ese anhelo cuando en una mala salida del argentino Enzo Fernández, Saka robó y Leandro Trossard sorprendió con un riflazo a quemarropa que venció al portero. 2-2 la cuenta y parecía que podría haber remontada, aunque los azules lograron cerrarse a tiempo.
Así, Arsenal sumó 21 puntos y se metió segundo en la tabla de la Premier, escoltando a Manchester United y desplazando a Liverpool al tercer lugar. Chelsea se quedó en el noveno lugar con 12 unidades.
