Liverpool vive Díaz felices de cuenta del gran momento de Lucho, quien viene de un doblete en la victoria de Liverpool por 3-0 contra Bournemouth por la Premier League.
El colombiano ha sido el centro de los elogios tras un partido redondo y una temporada que invita a la ilusión, pues ya lleva 5 anotaciones y una asistencia en este inicio de la era Arne Slot.
Este martes su equipo recibe a West Ham por EFL Cup y el sábado visita a Wolverhampton por la Premier, duelos en los que será difícil no tenerlo en cuenta, aprovechando su gran momento.
Su rol sigue siendo de extremo por la izquierda pero cada vez rota más y mejor en el frente de ataque y ha empezado a cumplir las tareas de marca que públicamente le ha exigido su DT. La sonrisa eterna que tanto admiraba Klopp no acabó con su salida y en cambio ahora todo luce un poco más completo.
Zanahoria y garrote
Pero en Inglaterra, vale decir, no todos están tan exaltados con estas presentaciones del guajiro, pues prácticamente es lo que esperaban desde su fichaje, en enero de 2022.
“Es un jugador muy interesante porque tiene mucha energía, trabaja duro para el equipo, no marca suficientes goles, pero hoy marcó dos y cinco en total durante toda la temporada, lo cual es bueno para él”, destacó Peter Schmeichel, el ex arquero danés que ahora es comentarista en Sky Sports.
Aunque probablemente no fuera su intención bajarle el precio al doblete del colombiano, para él hubo detalles que facilitaron las dos anotaciones a Bournemouth.
“El primero, seguro Kepa se lo pone fácil a Díaz, es uno de esos, los llamamos momentos locos en los que tomas una decisión y a mitad de camino, ya no te puedes recuperar de eso”, afirmó.
“El segundo. Hablamos de que Luis Díaz no es un gran goleador y no tiene las oportunidades. Vimos las dos oportunidades que falló, luego marca dos goles en dos minutos. No diría que el segundo gol fue una gran definición, tuvo un poco de suerte. Tiene un pequeño hueco entre las piernas y el balón entra por ahí”, añadió.
Es decir que sí, bien por un doblete, pero uno se lo entregó el arquero y el otro fue obra de la fortuna. Bueno, con eso vive Díaz y en realidad parece tomarlo con mucha naturalidad. Es el precio de ser figura de uno de los grandes clubes del mundo.
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