Del amor al odio pasaron en Boca Juniors así, sin más: los elogios al talento de sus colombianos han dado paso a una ola de críticas que se han movido entre la prensa y las redes sociales y han hecho que el ambiente se haya enrarecido para todos los que siguen a órdenes de Miguel Russo.
El caso más complejo parece ser el de Sebastián Villa, quien estaría en Colombia tras decidir que no entrenaría más con Boca Juniors como mecanismo de presión para ir a Brujas de Bélgica, equipo que ya habría hecho al menos dos ofertas por él. Se trata ahora de un tema que ha pasado a manos de los abogados.
No es mejor la condición de Frank Fabra, quien ya había sido criticado antes de la Copa América y no ha recuperado su nivel tras el regreso. El jugador fue señalado en la derrota contra Santos en Brasil por Copa Libertadores y después le achacaron responsabilidad en goles contra San Lorenzo y Argentinos. Ya el chico Agustín Sandez, de las inferiores, le ha ganado la titular.
A Edwin Cardona parecen no perdonarle la decisión de regresar a Colombia tras la Copa América y en el regreso no hubo mejor fortuna: aunque hizo gol contra Argentinos, terminó expulsado después en una acción discutida.
"Sin embargo, también fue el que se hizo expulsar infantilmente cuando Boca iba en busca del triunfo. Y por más que Russo haya argumentado que la roja fue producto, en parte, del estado resbaloso de la cancha, la realidad es que al DT no le gusta nada quedarse con uno menos ("Entramos 11 y salimos 11", suele repetir)", explicó el diario Olé.
Para Jorman Campuzano las cosas son complicadas desde mucho antes de la Copa América, pues con la aparición de Cristian Medina y Alan Varela, más el regreso de Agustín Almendra, prácticamente está borrado, según explicó Olé. Aunque jugó contra Argentinos, hizo parte de un equipo de recambio, por lo cual habría pedido a Boca que lo deje salir y habría tenido charlas con Millonarios.
La situación provocó una situación compleja para Jorge Bermúdez, ahora directivo del club, y quien supo escribir páginas gloriosas que hicieron que los colombianos se abrieran puertas en Boca.
"Hace 24 años vinimos a demostrar que éramos hombres íntegros, además de valiosos deportivamente. Veníamos a defender los colores con orgullo", dijo el Patrón, quien llegó a Boca en 1997, disputó 165 partidos y marcó 16 goles, en un equipo de ensueño con Óscar Córdoba (162 PJ) y Mauricio Serna (123 PJ, dos goles), que ganó seis títulos, incluidas dos Copa Libertadores y una Intercontinental.
Hoy las redes sociales dan cuenta del #Bastadecolombianos que fue tendencia el fin de semana y de varios comentarios contra los nacionales en ese club. ¿Hasta cuándo aguantarán la presión? Esa es la gran duda.