¿Es discutido? El lujo del Junior sobre los demás clubes colombianos

Junior de Barranquilla es discutido por algunos, pues su fútbol no termina de llenar y el entrenador Luis Amaranto Perea está en la lupa, a pesar de que su trabajo silencioso ha dado resultados. Este jueves, el equipo de curramba se clasificó a los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2020, tras eliminar a Unión La Calera por penaltis, de visitante en Chile y con dos expulsados.

Seguramente no es el equipo de la elegancia y contundencia de otros años; no es el de más lujos y fintas; pero es un equipo práctico, luchador, serio y que, por el momento, saca buenos resultados. Además, es el único equipo colombiano en competencia internacional, después de la debacle en Copa Libertadores y la ráfaga de eliminaciones en Sudamericana.

Y aunque es criticado y resistido, el tiburón se da el lujo sobre los demás equipos colombianos, que en el remate del año ya no tienen nada por jugar, o tratan de salvar la campaña con el título en la Liga colombiana, así como con una clasificación a Libertadores o Sudamericana.

Junior es el único equipo que está vivo en tres competencias: Sudamericana, Copa Colombia y la Liga. Ni América, Nacional, Millonarios o Santa Fe, para citar algunos ejemplos, pueden decir lo mismo.

Y es que, sin contar la Liguilla -que es un invento de Dimayor para los eliminados y así cumplir con otros patrocinadores y contratos-, solo América y Deportes Quindío están compitiendo en dos torneos: el escarlata está vivo en Liga y Copa; mientras el cuyabro también compite en Copa Colombia y en el Torneo de Ascenso.

De esa manera, en medio de la crisis del fútbol colombiano y su mediocridad, vale rescatar lo hecho por Junior, un equipo que ha invertido y que es el único que ha ganado algo este año: la Superliga. ¿Hasta dónde llegará?