Denis Cheryshev, figura de la selección rusa en el pasado Mundial de fútbol, está en graves problemas y estaría siendo investigado por un supuesto caso de dopaje. Así lo asegura el diario inglés ‘The Telegraph’, que hace referencia a unas declaraciones del padre del mediocampista que lo tienen comprometido por usar, aparentemente, una inyección de hormona del crecimiento.
Luego de las declaraciones de Dimitri, progenitor de Cheryshev, el jugador se defendió el pasado mes de julo, afirmando que “no sé de dónde sacó eso el periodista. Tal vez ellos no entendieron a mi padre porque nunca he usado ninguna sustancia prohibida”. Además, la Federación rusa tuvo que aclarar que a Denis le hicieron un tratamiento de plasma rico en plaquetas, algo que es legal, y que el diario ‘Sport Weekend’, que entrevistó al padre del futbolista, estaba malinterpretando las palabras del padre.
El uso de la hormona de crecimiento no es un delito antidopaje, siempre y cuando sea por un tema netamente médico; pero, de no serlo, el jugador podría ser castigado con cuatro años de inactividad.