¿Lo que pasa en la cancha se queda en la cancha? Sí y no. Sí cuando se resuelven ahí las diferencias entre los futbolistas, No cuando por obra y gracia de las redes sociales se saben cosas que no siempre se deberían publicar.
Le acaba de pasar al defensor Dejan Lovren, ex jugador del Liverpool que ahora es compañero de Wilmar Barrios en Zenit de San Petersburgo.
En un Instagram Live, el jugador contó que guardó su rabia en un partido de Champions League hasta que coronar su 'vendetta' en uno de selecciones. Así, tal cual: "“¿Golpeé deliberadamente a Sergio Ramos después de lesionar a Salah? Sí, es posible”, dijo al canal egipcio Sada El Balad.
Pudo ser peor de no ser porque se involucró Modric, compañero de ambos: "Luka Modric trató de reducir la tensión entre Ramos y yo. Nos estábamos enfrentando a España con la selección de Croacia. Deliberadamente le golpeé con los codos y me dije que ya estábamos empatados".
La 'venganza' por la derrota en la final de la Champions League de 2018 (3-1), en la que una falta de Ramos provocó una lesión en el hombro a Salah que limitó a casi nada su participación en el Mundial de Rusia con Egipto, se cobró en la victoria con Croacia 3-2 frente a España. Así de claro.
“Respeto a Ramos como jugador y lo que hace por su equipo. Ha ganado muchos títulos, pero por otro lado, hace algún comportamiento que no me gusta y perjudica a los jugadores... No quiero hacer una gran historia, pero creo que lo que hizo Ramos fue intencionado para lastimar a mi amigo, así que era hora de pagar por lo que ha hecho”, añadió Lovren.
Esas cosas de la cancha que a veces sería mejor mantener ahí, en el secreto de la cancha...