Fútbol y demencia: medidas por conmoción cerebral, críticas y dudas

Casos de demencia en estrellas de selección encendieron alarmas y ya hay resultados visibles.

Arsenal Wolverhampton

Fuerte choque de Raúl Jiménez con David Luiz.

Foto: EFE

En esta noticia

  • Enviar
  • Guardar
  • Comentar
01 de febrero 2021 , 06:05 a. m.

Cuando se confirmó en Inglaterra que Sir Bobby Charlton sufre demencia, la preocupación por la relación de esa enfermedad con los choques y golpes en la cabeza que sufren los futbolistas pasó de ser un asunto de conversación privada a una prioridad para los organizadores de las competencias. Esto, en definitiva, es un asunto muy serio.

En las últimas horas se produjo una declaración conjunta de la Liga y la Asociación de Fútbol que estableció un cronograma para el lanzamiento del nuevo protocolo, que les permitirá a los equipos hacer hasta dos sustituciones permanentes adicionales cuando se presenten casos de conmoción cerebral en un partido.

El modelo establece que el rival haga el número equivalente de cambios, de modo que si se usa un sustituto por conmoción cerebral, ellos pueden hacer un cambio.

El nuevo protocolo entrará en vigor por primera vez en la FA Cup a partir de la quinta ronda, en este mes de febrero, según dijo la FA, método que se empleará en la Superliga y el Campeonato Femenino a partir del 6 de febrero, con el visto bueno de la International Football Association Board, el organismo legislativo del juego.

"El ensayo es el resultado de la consulta de la IFAB con las partes interesadas y las recomendaciones de su grupo de expertos en conmociones cerebrales para permitir sustituciones adicionales para jugadores con conmoción cerebral real o sospechada", dice el comunicado oficial.

Sin embargo, los protocolos han sido criticados por el Dr. Willie Stewart, especialista en lesiones cerebrales, quien los describió como algo parecido a “ponerle lápiz labial a un cerdo”. Él, como el sindicato mundial de jugadores FIFPRO, había estado a favor de un período de evaluación de 10 minutos para un jugador con conmoción cerebral con un sustituto temporal.

El director ejecutivo de la FA, Mark Bullingham, defiende su idea y dice que el protocolo es funcional: “Estoy realmente sorprendido de que esto se vea como una excusa. Veo que esto va más allá. Sacaremos del campo a cualquier jugador sospechoso de conmoción cerebral. No sigo la lógica allí. Entiendo que hay dos modelos que tienen valores diferentes pero, desde nuestro punto de vista, vemos esto como un modelo más fuerte, el modelo más seguro, y eso es lo que nos aconsejan los expertos médicos".

Caso Charlton, el detonante

Nobby Stiles fue el quinto integrante del único seleccionado inglés campeón del mundo en haber sido diagnosticado con demencia. Pero no fue hasta que se conoció el caso de Bobby Charlton, que se sumó al de su hermano Jack, que murió en julio, el de Ray Wilson y Martin Pieters, que se empezó a abordar con más seriedad la preocupación por la relación entre la práctica del fútbol y la enfermedad degenerativa de la demencia.

Investigaciones reveladas por la BBC demostraron que los exfutbolistas tienen tres veces y media más probabilidades de morir de este mal que la población en general.

"Estos jugadores mayores están muriendo como mi papá", dijo John Stiles en charla con Alan Shearer, excapitán del equipo británico. "Muchos no tienen medallas para vender. Está bien, por supuesto, buscar identificar la causa de la demencia en los jugadores mayores, pero en realidad la causa es irrelevante para los jugadores mayores. porque necesitan ayuda ahora. Espero que la muerte de papá sea el catalizador para abordar este escándalo ".

La preocupación es real en Reino Unido y en Escocia avanzaron cuando la hija del exdelantero del West Bromwich Albion, Jeff Astle, decidió investigar si los repetitivos entrenamientos de su padre habían tenido algo que ver en su fallecimiento por una enfermedad cerebral que habitualmente se relaciona con boxeadores.

"Cuando su padre (Jess Astle) jugaba al fútbol, había entrenamientos que los dedicaba únicamente a golpear la pelota con la cabeza. Cientos de veces al día", asegura a Efe Michael Grey, profesor de la Universidad de East Anglia y responsable de un nuevo estudio que trata de resolver la ecuación entre el fútbol y la demencia.

La defensa de algunos es que el fútbol ha cambiado mucho desde 1966, que los balones ya no pesan tanto, que los servicios médicos son mejores y la agresividad de ciertos jugadores ha tenido que disminuir por riesgo de expulsiones y sanciones. ¿Pero elimina eso el riesgo de padecer enfermedades? Grey cree que no.

"Golpear una pelota como forma de vida es un riesgo. No quiere decir que toda persona que golpee una pelota con la cabeza vaya a tener demencia, pero queremos que entiendan cuál es el riesgo", apuntó en charla con EFE.

"Puede que fuera un riesgo mayor para los que jugaron al fútbol hace años, pero no tiene nada que ver con el hecho de que jugaran con pelotas más pesadas que ahora. Ese no es el problema. El problema es la cantidad de veces que se golpea una pelota, por ejemplo durante los entrenamientos", añadió.

"Nadie quiere cambiar el juego ni obligar a la gente no jugar, lo que queremos es reducir los cabezazos durante entrenamientos y limitar los cabezazos en los niños. Ellos no deberían golpearle con la cabeza nunca", reflexionó el experto. 

Ya en Estados Unidos y Escocia se han limitado e incluso prohibido que los niños golpeen la pelota con la cabeza. Es un comienzo, igual que las primeras normas que pretenden imponer en el fútbol inglés. Pero falta todavía mucho terreno por investigar y por controlar en los reglamentos de juego y de entrenamiento.

Síguenos en nuestras redes
Comentar
Guardar

Recomendados

  • Premier League
  • Serie A
  • Bundesliga
boton left
boton right