Atlético Nacional se quedó con el clásico de la fecha en la Liga Betplay I 2025 y, aunque fue un apretado 1-0, dio muestras de calidad y solvencia en su plantilla.
La figura de la jornada fue marino Hinestroza, quien no marcó pero fue desequilibrante en ataque y sacrificado a la hora de la marca.
El delantero salió ovacionado por los más de 40.000 hinchas que llenaron el estadio Atanasio Girardot y que reconocieron su esfuerzo.
Justamente en un momento, mientras caminaba hacia el banquillo en medio de los aplausos, se dio un momento que a algunos les pareció provocación y a otros casualidad.
¿Fue a propósito?
Cuando marino iba aplaudiendo a la gente y caminando, pasó por delante de Juan Fernando Quintero, quien se alistaba para cobrar un tiro de esquina.
Casi ni se miraron pero algunos interpretaron el aplauso y el caminado lento como una provocación. Lo cierto es que marino pasó como en desfile y Quintero cobró largo, desubicado y sin generar peligro en el área local.
Así fue el momento:
🇳🇬 Marino Hinestroza salió ovacionado por el público del Atanasio Girardot. Le pasó por el frente a Juanfer Quintero, que se alistaba para cobrar un tiro de esquina, el cual terminó fuera del campo. pic.twitter.com/Ddvzo3luAT
— Juan Andrés Pineda (@juanpinedar27) March 10, 2025
"Quería darle las gracias a la hinchada por todo el apoyo porque llenaron el estadio que eso nos da un poco más de fortaleza para afrontar los partidos”, fue el comentario de Marino en Win Sports, lo que da la idea de que pudo ser una casualidad.
Para Faryd Mondragón, en cambio, estuvo lejos de eso: "Me van disculpar, pero a mi esto no me parece gracioso, me parece provocador y, sobre todo, le hacemos un daño a Marino que queremos proyectar como una figura internacional y eso se lo van a tener que pulir por que esto no tiene nada que ver con jugar bien al fútbol. Hay que ser también correcto", dijo en la transmisión del partido.
Al final, Atlético Nacional aseguró al victoria y América se resignó a perder el clásico, con Quintero y Vergara de suplentes y mucho por trabajar todavía.