Atlético Nacional es campeón del fútbol colombiano. A pesar de sufrir durante gran parte del partido en Ibagué, los verdolagas lograron sacar adelante un duelo durísimo de la mano de un Kevin Mier magistral.
A continuación el balance del comportamiento defensivo del verde paisa:
Fue una primera parte preocupante para la zaga defensiva del cuadro verdolaga. El dueño de casa arrancó el duelo con total intensidad y logró meter en su arco a Mier y compañía.
En el primer cuarto de hora, el cuadro tolimense se adueñó de la banda izquierda verdolaga, aprovechando así la pasividad en marca de Dorlan Pabón y el flojo balance de Danovis Banguero. Marulanda, Cataño e Ibargüen lograron jugar a placer por ese costado.
La buena noticia para Nacional en esos primeros instantes era Mier, el joven arquero respondió brillantemente cuando se lo exigió.
Curiosamente el primer gol llegó por el otro costado, el derecho del verde. Junior Hernández se proyectó, mandó un centro a media altura y Emanuel Olivera, de terrible noche, marcó en propia puerta.
Más adelante, la visita logró emparejar un poco el duelo y no sufrirlo tanto. En dicho aspecto fue importante la labor de Jhon Duque y Sebastián Gómez en la mitad del campo. Incluso el mismo Duque tuvo un par de incursiones ofensivas importantes, pero recibió dos golpes que terminaron sacándolo del juego.
Sobre los 37 minutos, nuevamente la banda izquierda paisa hizo agua. Luis Mirando levantó un centro medido, Juan Fernando Caicedo con un movimiento se le escapó a Olivera y la mandó a guardar. Nada pudo hacer Mier.
Para la segunda parte, Hernán Darío Herrera movió su once. Sustituyó a Duque por Alex Mejía par liberar a Gómez y Yeison Guzmán ingresó en lugar de Andrade.
Al 53' llegó un nuevo groso error de Olivera. Imprudente falta dentro del área contra Miranda que el juez Andrés Rojas revisó en el VAR y posteriormente sancionó pena máxima. Por fortuna para el argentino, Mier, la gran figura verdolaga, salvó e inmediatamente después provocó la expulsión de Daniel Cataño.
Con lo anterior, Nacional se acomodó. Gómez tuvo muchísima más libertad en la mitad para dar ese primer pase limpio a Guzmán o por los costados. Así mismo tanto Banguero como Candelo dejaron de sufrir, salvo una que otra proyección de Lucumí.
Los zagueros Olivera y Juan David Cabal tan solo tuvieron que preocuparse por Caicedo, quien al 72 le dio paso al paraguayo Gustavo Adrián Ramírez.
Y como no había qué resguardar, la defensa de Nacional fue adelantándose cada vez más. Finalmente Olivera pudo resarcir un poco se fatídica noche, cuando en tiempo añadido peinó la bola tras un tiro de esquina y le dejó servido el gol del título a Jarlan Barrera.
_7.png)
