- Muchos expertos sostienen que la cáscara de banano puede comerse tanto como la pulpa.
- Además, esta parte del plátano combate el estreñimiento y regula el colesterol y el azúcar en la sangre, entre otros beneficios.
Durante tiempos inmemoriales las personas han optado por comer únicamente la pulpa del banano, ignorando que la cáscara (como en el caso del aguacate) tiene muchas propiedades verdaderamente beneficiosas para la salud y para la alimentación en general. Por ejemplo, algunos expertos sostienen que sirve para combatir el estreñimiento y que también ayuda a regular el colesterol y el nivel de azúcar en sangre. En ese contexto, aquí contamos por qué no debe tirar la cáscara del plátano, una de las frutas más sabrosas.
Se pueden hacer distintas recetas con la cáscara del banano.
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De acuerdo a la información que cita La Nación sobre la chef y docente Camila Yazbek, “la cáscara puede ser realmente deliciosa”. Además, la nutricionista Priscilla Primi sostiene que “las fibras insolubles, por ejemplo, también se encuentran en la pulpa, pero están más concentradas en la cáscara”. De hecho, en Colombia y en otros países de la región se opta por incluir la cáscara de banana en distintas recetas desde hace mucho tiempo. Hay que descartar el prejuicio que existe al respecto.
No se debe tirar la cáscara de banano porque presenta muchos beneficios para la salud. De acuerdo a la información que brinda el sitio Tua Saúde, especializado en salud y nutrición, es útil para: combatir el estreñimiento, regular el colesterol y el azúcar en la sangre, prevenir el envejecimiento prematuro, favorecer la pérdida de peso, reparar y cuidar la piel, combatir infecciones, evitar la fatiga muscular, mantener la salud visual, mejorar el sueño y mantener la salud de los huesos.
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Té de cáscara de plátano: se deben remover las puntas y la suciedad. Quedará muy sabroso.
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Batido de matcha y cáscara de banana: hay que licuar la cáscara del banano.
- Pan de cáscara de banano: se necesita además 1 taza de agua; 1 taza de leche descremada; ½ taza de aceite; 30 gramos de levadura fresca; ½ kg de harina de trigo integral; ½ pizca de sal; 1 huevo y 1 cucharada de azúcar.