Este miércoles, por la tercera fecha del grupo C de la Champions League, PSG y Nápoles empataron 2-2 en un partido en el que los parisinos no lograron mostrar su mejor versión. Por su parte, los italianos mostraron una gran disposición táctica, teniendo al arquero colombiano David Ospina como un hombre determinante para el resultado.
El inicio del partido hizo pensar que el equipo francés dominaría las acciones, pues al minuto dos se acercó por primera vez con la intención de conseguir gol: Neymar remató con derecha, tras una asistencia de Mbappe, pero la pelota se fue cerca.
Igualmente, el delantero uruguayo Édison Cavani tuvo un acercamiento peligroso al minuto siete, en un remate con pierna izquierda, tras una oportuna asistencia de Neymar. Luego, el mismo jugador ‘charrua’ probó al arquero colombiano, quien respondió muy bien, al minuto 17, para evitar que los locales abrieran el marcador.
Sin embargo, con el pasar de los minutos el equipo italiano comenzó a adueñarse de la pelota y de las acciones de juego. Al minuto 23 el belga Dries Mertens puso la pelota en el palo, tras ganarle la espalada a los dos centrales del equipo local, que se vieron mal en la jugada.
Nápoles ejerció una dura presión sobre el PSG, con el objetivo de recuperar rápido la pelota y no sufrir los arranques de velocidad peligrosos de Mbappe y Neymar. Así, los dirigidos por Carlo Ancellotti se hicieron al control del balón y lograron hacer buen uso de él, acercándose al área del arquero Areola.
El buen juego de los visitantes era evidente y, al minuto 28, lograron abrir el marcador. Tras un pase largo por derecha de Callejón, el delantero Lorenzo Insigne develó la mala noche de los centrales del equipo local, les ganó la posición, y picó el balón ante la salida del arquero.
PSG sintió la anotación, y trató de acomodarse mejor en la cancha, sin poder emparejar el partido en lo futbolístico. Sin embargo, a los 37 se volvieron a juntar Neymar y Mbappe, quien nuevamente hizo lucir al arquero colombiano.
Los locales salieron al segundo tiempo con la clara intención de empatar el juego. Con más manejo de pelota, y mayor profundidad, el equipo francés comenzó a llevar peligro al área protegida por Ospina, quien respondió de gran manera a dos opciones claras: al 49, un remate de Neymar, y al 51, un cabezazo potente de Meunier.
La determinación de los parisinos dio resultados al minuto 69. En una acción desafortunada para el lateral izquierdo Mario Rui, quien descolocó a Ospina tras un remate de Meunier, la pelota se fue adentro del arco para poner la igualdad.
No obstante, los dirigidos por Ancelotti no renunciaron a su orden táctico, y a su efectividad. Al minuto 77, el belga Mertens dejó nuevamente mal parado al defensor Marquinhos, y logró rematar de derecha para poner el 1-2 a favor de los visitantes.
Los italianos continuaron con su dominio de la pelota, tratando de apaciguar la embestida de PSG, que no encontraba claridad en hombres determinantes como Neymar, Mbappe y Di María. Sin emabrgo, ya en tiempo de reposición, el argenti logro sacar y gran remate que puso el marcados en números iguales.
Con el resultado, los italianos se ubican segundos en la tabla, con 5 puntos, mientras que los de París quedaron terceros, con 4.