El grupo de la muerte de la Champions League inició con un verdadero partidazo entre dos históricos de Europa: Liverpool y AC Milan.
En el infierno de Anfield, el equipo inglés, como en los viejos tiempos, remontó el marcador y pasó a ganar el partido por 3-2 tras irse al entretiempo en desventaja.
Antes de los 10 minutos de juego, los de Jürgen Klopp abrieron el marcador con un disparo de Trent Alexander-Arnold, el cual tuvo un desvío previo en la pierna de Fikayo Tomori, suficiente para descolocar al arquero Mike Maignan que había dejado su palo para atajar el disparo.
El cuadro de Merseyside continuó con la arremetida y cinco minutos más tarde pudo aumentar la diferencia desde el punto blanco del penalti; sin embargo, Maignan se hizo gigante y le atajó con categoría el remate a Mohamed Salah. En el rebote, el arquero francés también fue figura y contuvo el disparo de Andrew Robertson.
El penalti atajado fue un envión anímico para los de Stefano Pioli, quienes en el final del primer tiempo pasaron a ganar el partido. En el minuto 42, Ante Rebic le puso el sello de 'golazo' a una gran jugada colectiva que tuvo participación previa de Brahim Díaz y Jesse Saelemaekers. El delantero croata envió el balón al palo lejano de Alisson, quien se estiró a ras de piso, pero no puedo evitar la caída de su arco.
Dos minutos más tarde, Brahim Díaz fue el encargado de poner a ganar el rossonero tras empujar el esférico al fondo de la red en una acción que tuvo un remate previo de Theo Hernández, el cual fue bien atajado por Alisson.
En el segundo tiempo los reds recordaron el milagro de Estambul y al minuto 55 igualaron las cargas. Mohamed Salah recibió un gran pase de Origi, para definir con sutileza ante el achique miedoso de Maignan.
Con el 2-2 en el marcador, finalmente, Liverpool encontró en su capitán al héroe de la noche, pues en el minuto 69, Jordan Henderson se hizo cargo de un rebote tras un tiro de esquina y, sin dejar caer el balón, sacó un fuerte disparo de media distancia con su pierna derecha, para vencer por tercera ocasión al portería del conjunto italiano.
El partido fue intenso de principio a fin, pero fue el equipo inglés el que se quedó con los tres puntos, luego de una lluvia de goles y emociones en Anfield. ¡Partidazo!
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