Por muchas razones fue una noche mágica, inolvidable. No solo por la victoria, que selló la clasificación del Junior a la semifinal del fútbol profesional colombiano, sino por la exquisitez en que fue concebida y, en especial, por la transformación definitiva del juvenil Norvey Orozco de promesa a realidad, y la consolidación de su atacante Teófilo Gutiérrez como goleador.
En el contundente 4-1 ante Quindío, en el estadio Roberto Meléndez, Norvey Orozco abrió el camino del triunfo en el minuto 20 del primer tiempo al aprovechar un precioso pase de Hayder Palacio.
Teófilo Gutiérrez puso el 2-0, en el minuto 7 del segundo tiempo, con un zapatazo a media altura.Emerson 'El Piojo' Acuña capitalizó un debil rechazo del arquero Alejandro Otero, tras un disparo de Luis Yánez, y decretó el 3-0 en el minuto 25.
Un desafortunado despeje de John Valencia, que introdujo el balón en su propio pórtico ante un centro de Santoya, estableció el descuento de Quindío, en el minuto 38. Pero en el minuto 43, Teófilo Gutiérrez, de impecable golpe de cabeza, puso cifras concretas en el marcador.
Las acciones más emotivas del partido, además de los goles, se observaron cuando Norvey Orozco salió del terreno de juego para darler paso a Luis Yánez, y más tarde, cuando 'Teo' abandonó la cancha para ser sustituido por Luis Carlos Ruiz. Fue el reconocimiento a los ídolos.
Fausto Pérez Villarreal
ADN/ Barranquilla
