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El poderoso terminó de derrumbarse en la segunda parte.Foto: Vanexa Romero
Por:
Redacción Futbolred
08 de diciembre 2018, 09:38 p. m.
Independiente Medellín cayó 4-1 contra Junior en su visita a Barranquilla por la final de ida de la Liga II-2018 y tendrá una dura remontada el 16 de diciembre, en el Atanasio Girardot, si quiere salir campeón. Algunos de los goles del cuadro local llegaron por claros errores defensivos del visitante, que mostró las mismas falencias que ha tenido a lo largo del semestre.
Antes de que la defensa pudiera demostrar todo lo practicado en la última semana sin fútbol, David González fue el primero en aparecer para atajar un remate directo de Teófilo Gutiérrez. El experimentado guardameta mostró que esta sería una noche difícil para él.
Jesús Murillo y Hernán Pertuz fueron los grandes sacrificados en su área ante la poca colaboración defensiva que dieron Larry Angulo y William Parra, mientras que Elvis Perlaza y Sebastián Macías pasaban momentos difíciles para controlar a sus rivales por los costados.
Pero en el segundo tiempo González no aguantó más y vio cómo cayeron cuatro goles en su arco. En el primero Jarlan le ganó la posición a Murillo y no hubo respaldo para el central de sus compañeros y Díaz remató con tranquilidad para embocar el balón al fondo de la red.
El segundo gol de Junior llegó en un cobro de tiro de esquina de Jarlan que, sin marca alguna, cabeceó James Sánchez; la marca era de Parra, quien solo apareció hasta el final del cabezazo.
Pero los errores más claros llegaron en los dos últimos goles de Junior. Aunque el tanteador estaba 2-1, el tercer gol de la noche para el barranquillero fue el gran error del partido. Elvis Perlaza le dio un pase al medio a Larry Angulo, quien la quiso puntear para Murillo, pero el balón fue hacia atrás y el esférico le cayó a Teófilo Gutiérrez, quien encaró a David González amplió la ventaja para el rojiblanco.
El siguiente error también costó un gol. Cuando el partido ya terminaba, Yony González desbordó por la derecha y mandó un centro al área que no parecía peligroso. Sin embargo, Jesús Murillo se pifió en el rechace y el balón quedó en Marlon Piedrahita para celebrar el 4-1.