Win Sports denunció ataques violentos a personal en final de Copa

Atlético Nacional fue campeón de Copa BetPlay 2024 al ganar en el marcador global 3-1 a América tras el cero a cero en el estadio Pascual Guerrero, pero todo terminó empañado por la violencia de algunos hinchas del escarlata que hicieron que el partido finalizara en el minuto 84 y evitando que su rival celebrara el título dentro de la cancha.

Más allá de que los jugadores de Nacional se resguardó en el camerino hasta conocer la orden definitiva de los árbitros y Dimayor, en la cancha hubo un total infierno para algunos aficionados, quienes se pusieron de ring el terreno de juego al enfrentarse con la policía.

Sin embargo, no solo sufrieron jugadores, autoridades o parte de la logística que estaba dentro del estadio, sino también el personal del canal encargado de la transmisión televisiva, Win Sports, quienes sufrieron también la violencia de los hinchas escarlatas.

La periodista Pilar Velásquez, quien estaba cubriendo el partido para el canal, relató post partido que la transmisión tuvo que ser suspendida por los desmanes ocurridos, pues algunos hinchas dañaron la “antena de la fly, que es la que permite que llegue la señal a sus televisores, sufriendo afectaciones de los violentos”.

De igual manera, Win Sports confirmó a través de un comunicado que su transmisión no pudo llevarse a cabo como estaba planeado por los actos de violencia y confirmaron que “nuestra móvil sufrió daños que impidieron llevarles a nuestros televidentes el final del juego y la premiación”.

Sin duda alguna, la violencia vuelve a ser protagonista en el fútbol colombiano por encima de un evento que debería ser un espectáculo y los asistentes que sí fueron a disfrutar de la final, tuvieron que vivir una larga hora de pánico porque las autoridades tenían que controlar la situación para poder desalojar por completo el escenario.

Lo único claro es que Nacional festejó su título en el camerino por seguridad y todos dentro del estadio Pascual Guerrero vivieron un infierno en el que presenciaron estallidos en las tribunas, más gases lacrimógenos que las autoridades estaban usando para controlar los desmanes.