¿Matheus para rato? Diferencias e incógnitas condicionan al Porto

Ante todo, la confianza. El Porto se aferra a seguir ganando todo en Portugal, y buscan la manera de recomponer un mal inicio en la Champions League después de dos derrotas de dos posibles contra Atlético de Madrid que merecieron más, y una penosa noche en su propio estadio ante Brujas que los goleó por un marcador de 0-4.

Para recomponer su camino y mejorar en sus resultados, sueñan con mantener su nómina, entre ellos, uno de los pilares fundamentales ha sido Matheus Uribe desde que llegó a las filas portuguesas procedente del América de México en 2019. Su control en la medular es aplaudido por Sérgio Conceicao, entrenador del Porto, y su experiencia en el centro del campo lo hacen una carta de confianza.

El problema es que mientras Matheus Uribe está concentrado con la Selección Colombia, Porto se enfrasca en la manera de renovar el contrato de Matheus que por ahora culmina en 2023. Quedan poco más de seis meses para cumplir ese anhelo de los directivos en prolongar los servicios del antioqueño, pero saben que no será fácil.

Pese a que Matheus Uribe siempre ha dicho a los medios lusos que está muy feliz en Porto y resaltar la confianza del cuerpo técnico y compañeros, y que se siente como en casa, sus exigencias para renovar salen de lo que el club está ofreciendo. Pues así lo informa el diario O Jogo, “la diferencia entre lo que ofreció (el equipo) y lo que quiere el centrocampista se mantiene, pero en el Dragao reina la esperanza de poder retener a un jugador que ha sido fundamental para Sérgio Conceicao desde que llegó en 2019”. A su vez, mantienen que ya hubo contactos para su renovación, pero no hubo final feliz para el club en aquellos intentos.