Fue una jornada amarga, mucho más cuando se mira la tabla de posiciones de la Serie A y se descubre el gran daño que pueden hacer Milan e Inter en la disputa por el título de la Serie A.
Si bien es cierto que Fiorentina es siempre un rival complicado, lo de Napoli fue desconcertante pues venía de una gran victoria contra Atalanta y necesitaba mantener el ritmo en la actual jornada. No pudo ser y equipo de David Ospina (de nuevo titular) cayó 2-3 contra un rival muy efectivo.
El VAR le negaba a Zielinsky la primera celebración por un fino fuera de lugar y en la respuesta salvaba bien Ospina el riflazo de Biraghi.
Pero vendría el error en la zaga local, quedaría expuesto Ospina y cobraría Nicolás González, con parada de pecho y remate arriba para el 0-1 de Fiorentina que sorprendía al favorito.
Napoli se acercó pero sin precisión y el goleador Osimhen no dispuso de muchas opciones claras, con lo cual el primer tiempo fue bueno para intentar ajustar las piezas.
Se lograría a los 57 de cuenta del recién llegado Mertens, bien asistido por Osimhen y por fin el empate que tanto buscó el duelo de casa.
Entonces vinieron más errores en marca y algo más pudo hacer Ospina para evitar la caída de su arco contra Ikoné a los 66 y Cabral a los 72, en una reacción tremenda de Fiorentina, beneficiado por los cambios y la imprecisión del dueño de casa.
Sobre el final, a los Osimhen se inventó una gran jugada para poner la cuenta 2-3, buena respuesta pero tal vez tardía ante la necesidad de sumar en casa. Ahora Napoli tiene 66 unidades, las mismas de Inter y una menos que el Milan, pero con un partido más.
