Llegó marzo, el mes del regreso a la competencia para la Selección Colombia, que tendrá un par de duros exámenes después del gris cierre de Eliminatorias en 2024.
Tras caer, con remontada incluida, por 3-2 contra Uruguay, y después perder el invicto en Barranquilla contra Ecuador (1-0), todos saben que hay que lavarse la cara y recuperar terreno en la tabla de posiciones, en la que el elenco nacional ocupa el cuarto lugar con 19 puntos, los mismos de Ecuador, uno menos que los uruguayos y seis menos que el líder, Argentina.
El cargo de conciencia es grande y las deudas están en todas las posiciones e inclusive en las propias decisiones del técnico Néstor Lorenzo, incuestionable después de la buena campaña acumulada y la final de la Copa América de Estados Unidos, especialmente, pero ahora con dudas obvias tras dos derrotas seguidas, que de hecho son tres en el campeonato si se suma la de Bolivia en El Alto (1-0).
Armarse en defensa
Bien dicen que los equipos se arman de atrás hacia adelante y por eso, a la hora de las novedades en la próxima convocatoria para visitar a Brasil (20 de marzo) y recibir a Paraguay (25), habría al menos cinco novedades.
Empezando por el arco, se espera el regreso de Kevin Mier, un sacrificado permanente cuando el DT ha querido respetar la historia y la trayectoria de hombres como David Ospina. El hombre de Atlético Nacional apenas va tomando ritmo tras un mes alejado de las canchas por lesión y, aunque Lorenzo es de esperar a sus veteranos, esta vez haría justicia con el portero de Cruz Azul de México. Serían entonces Camilo Vargas, Álvaro Montero y el santandereano.
Pero donde habría retoques de fondo sería en el cuarteto defensivo, donde hay dos bajas obligadas: Juan David Cabal (Juventus) y Yerson Mosquera (Wolverhampton), ambos lesionados de gravedad, el primero justamente en una concentración nacional.
La buena noticia para Lorenzo es que sus indiscutibles están sanos y disponibles: Yerry Mina (Cagliari), Dávinson Sánchez (Galatasaray), Daniel Muñoz (Crystal Palace), Johan Mojica (Mallorca) y Jhon Lucumí (Bologna). Después hay discusión.
Carlos Cuesta perdió terreno en Genk y justamente pidió salir a Galatasaray para recuperar tono competitivo, pero podría ser sacrificado en busca de nuevas opciones: es el único de los habituales llamados que o fue a la tribuna o no sumó minutos en los últimos compromisos.
Y ahí se vislumbran varios candidatos: Jhohan Romaña, de San Lorenzo de Argentina, ha sumado elogios de todos los calibres y parece una opción ideal, pues tiene 26 años, mide 1,85m, tiene perfil derecho y su valoración en Transfermarkt está sobre los 3 millones de euros.
Pero no es el único nombre que se analizaría: Stiven Barreiro se ha hecho visible gracias a que juega con James en León y es indiscutible. Tiene 30 años, perfil derecho y mide 1,89m. Dato curioso: su valoración también está sobre los 3 millones de euros.
Refuerzos urgentes
En los laterales, Cristian Borja (América) y Santiago Arias (Bahía) son muy apreciados por el DT pero incluso él sabe que se necesitan alternativas y en esta convocatoria las buscaría.
Por esos e perfilan dos candidatos, uno que ya ha estado en los planes de Lorenzo para las Eliminatorias. Se trata de Andrés Román, bicampeón con Atlético Nacional, de 29 años, 1,83m, perfil derecho, 1,4 millones de valoración. Puede que vaya siempre detrás de la fila de Muñoz, pero es clave tener un refuerzo de perfil 'flecha larga' por si hay suspensiones o lesiones del hombre de Crystal Palace.
Finalmente, en el lateral izquierdo, donde nunca se afianzó cien por ciento ningún jugador y solo Johan Mojica ha conservado la titularidad, un candidato muy firme apareció en este final del 2024: Álvaro Angulo. A sus 27 años, ha sido capaz de mantener su aporte defensivo y ofensivo ahora con al camiseta de Independiente y es, sin duda, el hombre con mejor ida y vuelta en esa posición que se ha visto en años. ¿Llegará finalmente a una convocatoria? Falta poco, básicamente 10 días, según los cálculos, para conocer la convocatoria oficial.