El año 2020 no ha iniciado de la mejor manera para Jose Mourinho en Tottenham. Y no es por los resultados, al fin acaba de llegar y le van a tener paciencia.
Es que, según se confirmó este jueves, va a tener que encarar el partido de este sábado contra Liverpool y los de los próximos cuatro meses sin su estelar goleador, Harry Kane.
Kane sufrió una lesión en el muslo el pasado Primero de enero, contra Southampton, que según el diagnóstico final fue tan grave como se temía: aunque al comienzo se dijo que sería una especie de edema, el test específico encontró una rotura en el tendón de la corva de la pierna izquierda.
Kane, autor de 27 goles en la temporada, contando el Tottenham y la selección de Inglaterra, de la que es el capitán, tendrá que someterse a una cirugía, cuya incapacidad inicial es de cuatro meses.
Aunque el club es optimista, la preocupación, además de alcanzar a Mourinho, toca también al equipo nacional inglés, teniendo tan cerca la Euro 2020.
El momento es terrible para el Tottenham, que está a seis puntos de la cuarta plaza de la Premier, hoy en poder del Chelsea, y tiene los octavos de final de Champions League como telón de fondo, una llave contra Leipzig en la que no estará el artillero.