¿El aleteo de la mariposa en Inglaterra que provocará un terremoto en España? Algo así, guardadas las proporciones.
Un movimiento completamente inesperado se daría en la Premier League, de aprobarse la llegada del multimillonario Mohamed bin Salmán, príncipe heredero de Arabia Saudí. A la espera del aval de compra, por cerca de 300 millones de libras esterlinas, ya tendría en su lista de compras un primer nombre: Gareth Bale.
El diario Marca de España asegura que el galés es una de las prioridades del árabe y anticipa que, ante la crisis económica por el coronavirus covid-19, no habría manera de retenerlo, como sucendió en el pasado mercado con la oferta de la Superliga China, que al final no se cristalizó, a pesar de que las relaciones con el DT Zinedine Zidane ya estaban rotas.
Sin embargo no todas son buenas noticias pues, según las últimas valoraciones del mercado, el precio rondaría los 40 millones de euros, mucho menos que los 75 millones que pretendía el Madrid antes de la pandemia.
Bale se quedó, un poco de terco y para mantener sus ingresos de 18 millones de euros por temporada, pero en todo el curso apenas suma 3 goles en 18 apariciones. Ahí ya perdió el Madrid. Y podría seguir perdiendo pues ahora el jugador es el dueño total de la situación, si se tiene en cuenta que sin jugar seguirá facturando un elevadísimo salario en la casa blanca por dos años más, y si se va haría un negocio igual de rentable al asegurarse en un equipo que, económicamente, será el único que puede dar golpes sobre la mesa en el próximo mercado de la Premier.
Al final gana Bale... pero también podría ganar, de rebote, el colombiano James Rodríguez, quien se quitaría un poco la presión de tener que salir ahora, al precio que sea, a la primera Liga que levante la mano aun sin ser la más atractiva, ya que la masa salarial se aliviaría en Real Madrid y podría darse el lujo de esperar al final de su contrato, en junio de 2021, y salir con la comisión del agente libre.