El 2025 comenzó con un enfoque estratégico para el Cagliari. El entrenador Davide Nicola decidió cuidar a Yerry Mina, una de sus piezas clave en la defensa, asignándole un entrenamiento diferenciado junto al delantero Zito Luvumbo.
Ambos jugadores empezaron a trabajar de forma separada del grupo, realizando ejercicios específicos para evitar sobrecargas físicas.
La prioridad del cuerpo técnico es asegurar la disponibilidad de Mina y Luvumbo para el próximo encuentro contra Monza el domingo 5 de enero, un duelo crucial entre equipos que buscan escapar de la zona de descenso.
Con el Cagliari en una posición comprometida, Nicola sabe que cada jugador cuenta, y este manejo preventivo de la plantilla es para poder tener un equipo completo y competitivo.