Kylian Mbappé es el jugador más querido que tiene el fútbol francés. Su sencillez, su magia, sus goles y su prometedor futuro lo convierten en la gran figura de la Ligue 1. Sin embargo, el campeón del mundo, y estrella del PSG, también tiene hace sus pataletas.
Así se vio este sábado, a pesar de que anotó uno de los goles en el triunfo del PSG 5-0 sobre Montpellier.
De esa manera, Mbappé llegó a 14 goles e igualó a Wissam Ben Yedder, del Mónaco, en la tabla de goleadores de la Ligue 1. Y tal vez sus deseos de seguir anotando y ser el único artillero del campeonato, le jugaron una mala pasada en su temperamento.
Fue así cuando el técnico Thomas Tuchel decidió sustituirlo para darle minutos a Mauro Icardi. Mbappé no salió nada contento y discutió con su entrenador, haciéndole saber que no le gustó nada el cambio.